Job 33.29-30, Sal 145.18, Is 50.4-7, Iss 53.1-12, Is 55.6-11, Is 57.15, Jer 29.13-14, Mt 7.13-14 + Lc 16.19-31 + Jn 5.24-29, Mt 9.6, Mt 11.28-30, Mt 13.44-46, Mt 17.5, Lc 15.11-32, Jn 1.12, Jn 3.16, Jn 3.36, Jn 5.39-40, Jn 6.35, Jn 6.37, Jn 6.44-45, Jn 6.65, Jn 7.37-38, Jn 8.36, Jn 10.7-9, Jn 10.27-28, Jn 14.6, Jn 14.23, Jn 15.1-2, Jn 17.2, Hch 4.10-12, Hch 16.31, Ro 3.10-12+23, Ro 6.23, Ro 10.9-13, 1Cor 3.11, Fil 2.10-12, 1Tim 2.5, Heb 9.27-28, 1Pe 2.4, 1Pe 2.24-25, 1Jn 5.12, Apc 1.18, Apc 3.20.

 

La Biblia dice: El intento del corazón del hombre es malo desde su juventud. - Génesis 8, 21

Jesús hizo toda la obra necesaria para salvar al hombre de sus pecados. ¡Cumplido está! Jn. 19.30

El arrepentimiento - cambiar de pensamiento, pedir al Señor Jesus que perdone mis pecados es lo unico correcto.

 

Por eso el Señor Jesus dice: Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os daré descanso! Tomad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí; porque soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es suave, y mi carga ligera.

 

El hombre que busca, puede leer los versículos biblicos de arriba, para oir el Evangelio.

 

Señor, quien te puede describir?

 

- Te pusistes al lado de la mujer tomada en adulterio, cuando todos se distanciaron de ella.

- Te fuistes a la casa del publicano, cuando todos se indignaron por el.

- Llamastes a los niños, para que vinieran a tí, cuando todos los querian mandar fuera.

- Perdonastes a Pedro, cuando el se condenaba a si mismo.

- Exaltastes a la viuda pobre, cuando era ignorada por todos.

- Prometistes el paraíaso al malhechor crucificado, cuando todos le deseaban el infierno.

- Llamastes a Pablo a seguirte, cuando todos le temian como perseguidor.

- Huistes de la fama, cuando todos querian hacerte rey.

- Amastes a los pobres, cuando todos aspiraban las riquezas.

- Sanastes a enfermos, cuando ninguno tenia esperanza.

- Guardastes silencio, cuando todos te acusaron, escarnecieron y golpearon.

- Vinistes a lo tuyo - al pueblo Israel - y los tuyos no te recibieron.

- Moristes en la cruz, cuando todos celebraron su pascua.

- Fuistes herido por nuestras transgresiones, cuando todos se lavaban las manos.

- Has resucitado, cuando todos pensaban que todo se habia acabado.

- Vinistes por ultima vez a la puerta del corazon de aquellos que se tomaron por tu iglesia y llamaste a cada una de ellas, cuando todos dentro se consideraron ricos, no teniendo necesidad de nada.

 

El Señor Jesus es diferente a todos los hombres y grupos religiosos. No viene para hacer reproches, sino para quitarte del pecado. Ningun hombre se puede librar a si mismo del pecado.

 

La palabra de Dios dice: No hay justo, ni aun uno; no hay quien entienda, no hay quien busque a Dios. Todos se han desviado, todos juntos se han hecho inútiles; no hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. - Romanos 3,10 (Sal 143,1-2) Este testimonio tiene validez para todos los hombres. Ningun hombre puede redimirse ni salvarse a si mismo

 

Hay uno que no es como los demas. Uno que no ha devuelto el golpe. Uno que ha probado que te ama, que lo ha probado hasta la muerte. Uno que merece nuestra confianza. Uno que conoce cada detalle de tu vida, tambien aquellos detalles que pasaron en secreto. Uno que tiene poder de librarte del lodo del pecado mas profundo de tu vida. Uno que puede salvarte del castigo eterno, del infierno. Uno solo, que te puede dar vida eterna en el cielo. Uno que puede perdonar tus pecados. Uno que sabe todo de ti. El Señor Jesus no obliga a nadie a recibir el Evangelio. Dios ha dado al hombre una voluntad libre con la cual el hombre puede decidirse en contra del Evangelio. Pero el que se muere repentinamente y de forma inesperada sin haberse decidido por el Evangelio, sera perdido para siempre en el infierno (gehenna).

 

Solo con Jesus (Jn 14.6) hay perdon de pecados (Mt. 9.6) y vida eterna (Mt. 11.28-30)